Para la decoración de cocinas la distribución de todos los elementos clave, es imprescindible. Será esta distribución la que nos permitirá tener una cocina cómoda y práctica que nos permita cocinar de una forma óptima. A la hora de distribuir los diferentes elementos, uno debe pensar sobre todo en la colocación de la zona de trabajo, la placa de cocción, el almacenaje y el fregadero. Dependiendo del tamaño de nuestra cocina, podremos apostar por una distribución u otra. En todo caso, cada cocina es única y por ello nos tendremos que adoptar a sus propias singularidades.
Como ya hemos dicho, la distribución es una cuestión básica en la decoración de cocinas, pero no es la única cosa que debemos valorar, también hay otros factores que nos permitirán o no llevar a cabo el diseño de nuestra cocina con éxito. Entre ellos, el tamaño de nuestra cocina es un clave. Una cocina grande nos permitirá crear una zona de office donde poder desayunar, cenar e incluso comer. La forma de la habitación también es importante para hacer un diseño de cocina coherente: cocinas en U, cocinas en L, cocinas-pasillo, etc.
Otro tema fundamental en la decoración de cocinas es la elección de los muebles de cocina. Los muebles de cocina deben ser escogidos teniendo en cuenta diversos factores, entre los que se encuentran el estilo decorativo (cocinas modernas, cocinas rústicas, cocinas industriales, cocinas vintage, etc.) y el espacio de almacenaje. La decoración de cocinas pequeñas opta por armarios altos que llegan hasta el techo para así optimizar al máximo los metros disponibles, mientras que la decoración de cocinas grandes puede distribuir de una forma más espaciosa el sistema de almacenaje, incluyendo alacenas, islas de cocina, barras americanas, etc.
