La primera gran operación salida del año está aquí. Las vacaciones de Semana Santa son para muchos una oportunidad de disfrutar de unos días de descanso, de las procesiones o de los primeros rayos de sol. Si en tu caso estos días no vas a estar en tu piso de alquiler, atento a este post porque te ayudamos a evitarte disgustos causados por amigos de lo ajeno.
Sin pistas para los cacos
Sabemos que al día consultas un montón de veces tus redes sociales, pero no proclames a los cuatro vientos que tu piso de alquiler va a estar vacío. Pensarás que es una chorrada, porque sólo tus amigos lo podrán ver, pero nunca se sabe dónde un ladrón puede encontrar la oportunidad. Sé discreto y no lo pongas fácil.
¿Poco movimiento?
En periodo de vacaciones es probable que optes por dejar las persianas de tu piso de alquiler cerradas. ¡Error! Así si alguien está vigilando sabrá que llevas días sin pasar por casa. Es mejor dejarlas entreabiertas y si quieres despistar por completo, decántate por colocar programadores eléctricos en alguna bombilla de bajo consumo.
Revisa posibles marcas
Revisa la chapa del buzón, la puerta de tu piso de alquiler y los microfonillos del portero automático. Si ves cualquier cosa extraña pintada, alguna marca o pegatina procura quitarlas del medio. Muchos cacos utilizan un sistema de marcas para catalogar las viviendas. Con unas muescas recordarán si parece que tienes cosas de valor o vives sólo.
Colaboración vecinal
Si tienes un vecino de confianza mejor que mejor. No sólo te regará las plantas, sino que vigilará que todo vaya bien en tu piso de alquiler. Si sube y baja las persianas, enciende y apaga luces, parecerá que no te has ido.